Las arrugas en la piel surgen inevitablemente con el envejecimiento y otros factores, como la exposición prolongada a las radiaciones del sol. Cuando esto ocurre, las células comienzan a dividirse más lentamente y la dermis (capa intermedia) va adelganzándose, con lo que la piel pierde elasticidad y capacidad para retener agua. Al disminuir la hidratación, aparecen arrugas y surcos.

El Ácido hialurónico es una sustancia natural que existe en todos los seres vivos. Su función más importante es mantener y fusionar el agua con los tejidos, restituyendo el volumen perdido. Es por ello que hoy se utiliza con gran éxito como relleno para arrugas y surcos, por su eficacia y seguridad.